Dios establece a los reyes como sus ministros y reina a través de ellos sobre los pueblos… Los principales actúan, pues, como ministros de Dios y sus lugartenientes de la Tierra…la persona de los reyes es sagrada y …atentar contra ellos es un sacrilegio… Se debe pues obedecer al príncipe por principio de religión y de conciencia . El servicio de Dios y el respeto por los reyes son cosas unidas”.
Bossuet: Política sacada de las Sagradas Escrituras.